En mi opinión existen relaciones enteramente sexuales que dejan a un lado los sentimientos, al menos en un inicio. El problema es que estas relaciones  pueden terminar de una forma calamitosa, ya es factible que uno de los dos se involucre emocionalmente más que el otro, poniendo así las cosas en un  nivel distinto. Con esto el acuerdo inicial de no involucrar  el corazón se rompe.

En caso de que  se hallen en este tipo de relaciones, quizás convenga que no traten de racionalizar/verbalizar cómo se sienten, pues se trata de una unión que se basa en una atracción opuesta a la lógica. En esos casos pensar mucho  puede terminar con la relación. Tal vez es preferible aceptar que una buena química de los cuerpos -siempre en mi humilde opinión- significa que hay un tipo de sentimiento. Claro está que juega la posibilidad que esa  atracción sexual se convierta en alguna clase de amor bizarro.

Al final de cuentas hay muchos que desean mantener a su lado a la persona con la que comparten una química corporal fuerte, porque  gracias a eso no tienen que buscar en otras personas la satisfacción que les dan sus parejas.

¿Comentarios? Preguntas?

Humildemente,

El Hombre Impermeable

En caso de tener una/un novia/o que es exactamente igual a ustedes o similar, a la larga terminaran aburriéndose a menos que sean unos ególatras, ya que tener una relación con alguien igual a ustedes es como verse a un espejo cada día y estar de acuerdo en todo.

Por seguro están pensando  “El Hombre Impermeable esta desvariando por falta de hidratación”, pero ¿no les parece que tener una pareja que distinta a lo que son a ustedes hace las cosas más interesantes?

Claro que sí, tendrán de que hablar y, sobre todo, de que discutir y argumentar. Eso le dará vida a la relación e incluso puede que encienda la pasión.

¿Se imaginan una relación así?  Eso sería  perfecto ya que por lo general tendrían que llegar a acuerdos y no simplemente pensar lo mismo en todo.

Es probable que algunas personas prefieran el tipo de relación donde hay acuerdos totales. En lo personal me gusta ganarme  el sí de mi pareja, pues adoro trabajar por obtener algo de mi chica. ¿Masoquismo?, quizás, pero una cosa es segura: no me aburro para nada en mi relación.

Humildemente,

El Hombre Impermeable

creo en el amor y mucho, solo que no me dejo engatusar con ideas o pensamientos lambones que describen el amor como si sucediera en la estratosfera, casi fuera de este planeta. Por ello les confieso que sí creo en el amor a primera vista, en el flechazo de Cupido. 

Creo en el flechazo y que existe una sola vez en la vida. Es aquel amor que llega una vez a golpear la puerta de tu corazón. Si no lo sabes reconocer y no lo dejas entrar, lo perderas para siempre.  El problema con los tiempos modernos es que con tantos libros, películas, museos, obras de teatro y basura que se escribe con respecto al amor, hemos perdido la sensibilidad requerida y dejamos escapar ese amor, esa alma gemela.
 
Claro está, cuando nos damos cuenta, no dejamos ir a esa persona. Esos son amores de los buenos, para los que la palabra “separación” no existe peor aún “divorcio”.  Lo malo es que estos amores escasean cada vez más ya que cada vez los dejamos escapar con mayor facilidad. El asunto se complica porque esta clase de amores te llegan una vez en la vida. La situación es dura si lo piensan detenidamente.

Así que en este mes del amor les dejo como tarea dejarse de buscar el amor en libros y películas. No sigan toda esa basura mercantilista, sientan en el pecho y escuchen cuando alguien desde ahí les  diga “he ahí tu verdadero amor”. Entonces abre tu corazón y entrégaselo a esa persona sin preguntas, sin condiciones, sin respuestas.
 
Humildemente,

El Hombre Impermeable

Cuando el momento llega y el chico esta a “punto de caramelo”, como diría el Dr. M.  Hidalgo, muchas veces la inexperiencia hace que por nerviosimo haga la pregunta: ¿Puedo darte un beso? o ¿Puedo besarte?
 
No mis queridos contertulios, esa pregunta no se hace bajo ninguna circunstancia. Si ya estas ahí, a punto de besar a tu Galadriel, no la distraigas con preguntas innecesarias, simplemente acércate y sigue hasta que la distancia entre sus labios se acorte.
 
Recuerda que en ese instante, cuando están cerquita, ella retirara su rostro o moverá sus labios hacia otro lado si no quiere que la beses; pero si es todo lo contrario, como a veces sucede,  y están tan cerca el uno del otro, simplemente debes inclinarte hacia adelante  un poco más: con fortuna se besarán. Y,  como dicen por ahí, el primer beso es el mejor de todos y sobre todo define la relación, pero sobre eso hablaremos otro día.
 
Humildemente

El Hombre Impermeable

 No mis queridos lectores, cuando una relación va por mal camino, y se recae en problemas sin sentido que causan enojo, no hay vuelta atrás.  No sé por qué apareció esto de la terapia, los problemas de fondo seguirán ahí, aunque se discuta acerca de ellos y los dos se hagan promesas  para cambiar.
 
Es duro lo que escribo aquí, pero es una realidad: hacer una terapia de pareja es el último de los recursos, pues con eso lo único que se logrará es extender la agonía de la relación. 
 
Quizás lo más sano, en medio de situaciones conflictivas, es que los dos se separen en el mejor de los términos y traten, en la medida de lo posible, de ser amigos. Lo importante es separarse a tiempo, y no dejar que los problemas y las peleas también destruyan la amistad.
 
Esta es mi subjetiva apreciación al respecto, pueda que esté equivocado, pero es lo que pienso.
 
Humildemente,
El Hombre Impermeable

Sin atracción física desde un inicio, haga lo que se haga no nacerá, peor aún aparecerá  de modo planificado a base de esfuerzos. Quizás esto pueda parecer una idea muy radical y difícil de comprender, pero creo que es una circunstancia que tiene que ver más con la naturaleza que con nuestra racionalidad e intelecto.  De paso, me gustaría saber qué piensan ustedes al respecto.

Humildemente

El Hombre Impermeable

Luego de pensar por unos minutos  le conteste: “tu novio no tiene inteligencia emocional”. Se me vino esa expresión que por seguro la venía masticando y puliendo desde hace tiempo.  Por si no está claro esto, lo que sigue es mi idea de lo que es la “inteligencia emocional”.

Es un tipo de capacidad que todos tenemos y que nos sirve al inicio de nuestras relaciones para empezar a atraer a quien nos gusta, y, ya en pareja, nos debería ayuda a hacer llevadera la relación.  Esta inteligencia va creciendo, uno la va desarrollando según pasa el tiempo y, por supuesto, según vamos teniendo relaciones.

Creo que el desarrollo de la  Inteligencia Emocional es proporcional al número de  parejas que uno ha tenido.  Al momento, muchas personas pensaran que esta capacidad es sinónimo de “sentido común”. No estoy de acuerdo con esa opinión.

La Inteligencia Emocional evita que digamos frases como la que motivó este artículo; permite que no volvamos a hacer algo que nuestra pareja nos ha dicho que le es molesto. Por ejemplo, esta cualidad debería aconsejarnos cuándo callarnos o decir algo.

La Inteligencia Emocional supera al sentido común porque demanda de razonamiento para evaluar qué hacer y qué no hacer en una situación concreta de nuestras relaciones.

Humildemente,

El Hombre Impermeable

Hubo una época en la que una “prueba de amor” se manifestaba con el cuerpo, por ejemplo: le tomabas la mano a tu novia en la calle para que todo el mundo sepa lo ustedes dos tienen.

También estaba abrazar a la persona amada, lo que constituye un especie de ‘beso’ de todo el cuerpo, una expresión de contacto corporal muy hermosa.

Entre aquellas “pruebas de amor” clásicas se encuentra que una chica te bese.  ¡Ayyy!, que emoción que la mujer que atrae lo haga.  

La “prueba de amor” empezó a tener que ver con entregarle la virginidad a la persona amada hasta llegar al punto en el que se entrega el cuerpo y no sólo el corazón como evidencia suprema de lo que uno siente por el/la otr@.

 Con la llegada del SIDA  la “prueba de amor” se reflejaba en irse al laboratorio para hacerse un examen con el fin de tranquilizar a quien se convertiría en nuestra pareja. Esto es entendible en la medida en la que es la vida la que está en juego. Hay incluso personas que le piden a su pareja exámenes completos de ETS -Enfermedades de Transmisión Sexual-. Claro que  hasta dónde llegar con el tema de los exámenes médicos es una decisión personal.

A esta evolución de las “pruebas de amor” se han sumado unas nuevas que constituyen, en mi humilde perspectiva, un atentado a la privacidad. Ahora uno le demuestra a su pareja que la ama entregándole las claves de los correos electrónicos personales y cuentas de chat.   He escuchado casos de personas que piden que sean actualizados como novios/novias en el perfil de Facebook de su pareja. 

Hay gente que es muy radical con estás nuevas formas de comportamiento social pues  llegan a amenazar con la separación a sus parejas en caso de que no les faciliten las claves personales requeridas. Aquí las preguntas que se me ocurren son: ¿y dónde esta mi derecho a la privacidad?, ¿qué pasa con el respeto a mi individualidad, a tener un espacio personal?

 Sé que este es un tema un delicado y complejo, pero esta es mi opinión personal, ¿y ustedes qué piensan? 

Humildemente

 El Hombre Impermeable

¿Cuál es el truco? Quizás ya lo hemos practicado pero no conscientemente:  la mejor manera de acercase a una persona que nos gusta es a través de los juegos.  Sencillo, ¿no?  Sí, ya sé: les pasa que cuando están cerca de la persona que les atrae no pueden hablar porque es como  tener una papa caliente en la boca. Simplemente traten de llevar el encuentro a lo físico de manera delicada, un pequeño empujón acompañado con una sonrisa servirá. El empujón no debe ser muy fuerte; lo importante es que deben darse cuenta si la persona reacciona positivamente o no a él.

Si la persona en cuestión los mira con rostro de cabreo, de querer pegarles, ofrézcanle una sonrisita nerviosa y avancen en retirada para otro lado. Es claro: esa persona no tiene interés, así que no pierdan el tiempo.  Pero si la chica o el chico reacciona con una sonrisa y te empuja, empieza a jugar, eso podría ser una actitud más receptiva y comunicativa de su parte. Tal vez ahí tengan una mejor oportunidad.

El contacto físico es muy importante para acercarse a cualquier persona, pero nunca olvides que al fin y al cabo es una herramienta para tapar tus “problemas” de timidez.  Es una ayudita, una trampa que le haces a tus nervios, para que puedas hablar con mayor fluidez y dejes de estar pendiente de si las manos te sudan.

Espero que esta pequeña reflexión  les ayude.

Saludos de “El Hombre Impermeable”.

Lo primero que se debe tener en cuenta: cuando se habla con una mujer hay que verla a los ojos, no a un lado, no hacia abajo o hacia arriba, se la debe ver directamente a los ojos.   Si tienes la costumbre de llevar gafas, sácatelas, si ella lleva gafas, pídele amablemente que las ponga a un lado.  Se debe hacer contacto visual sin interferencia alguna.  Es necesario apagar Blackberries y otros celulares, al menos el tuyo. Como bien sabes, la mirada dice mucho de la intención tanto de un hombre como de una mujer. Debes ser franco y evitar mirar a la chica con vista de rayos X, como si tu única intención fuera llevarla a la alcoba  inmediatamente. Debes mirarla como la potencial madre de tus hij@s.

Las mujeres son seres muy susceptibles y se darán cuenta de cuáles son tus intenciones. El sexo es un componente de toda relación pero también debes mostrar que puedes ofrecerle a una mujer otras cosas como respeto, confianza y protección.

A lo largo de la cita se amable; siéntate erguido pero relajado; si estás nervioso, aprende a controlarte; si te sudan las manos, sécatelas con disimulo. Utiliza las manos, juega con tus manos, no como un prestidigitador o un mago con sus cartas: tienes que aprender a utilizar tus manos.  Las manos dicen mucho de las personas y por seguro tus manos dicen mucho. Modula tu voz, no grites, no hables rápido; recuerda que no la quieres ni asustar ni estás apurado por irte a otro lado; se pausado.

Cuando tu cita vaya al baño bajo ningún concepto le veas las posaderas, eso jamás, recuerda que estás con una mujer no con un bocadillo. Si tú piensas que ella no se da cuenta cuando le regresas a ver su parte posterior, estás equivocado: las mujeres sienten cuando cualquier hombre lo hace, en especial “tú”.

Debes saber hablar tanto como saber escuchar y, sobre todo, hacerla reír, hacerla sentir bien con ella misma y con tu compañía. No debes olvidar que es una cita, no es una competencia de “yoes”. Menos aún pienses que debes hablar de lo maravilloso que eres tú y gastarte un par de horas demostrándole por qué ella debe salir contigo … para nada.  Una cita es para conocer a tu futura novia, que ella hable, que ella te cuente sobre su vida; si ella te pide que hables sobre ti mismo, refiérete un poco a  tu vida, muy poco, y luego vuelve a preguntarle sobre ella y que siga contándote sobre su vida.

Presta atención y aprende sobre lo que ella te cuenta, de aquí puedes sacar mucha información que podrás utilizar tanto para logra otra cita como para elegir un restorán o simplemente para hacerle un pequeño regalo.  Las mujeres por lo general te dicen lo que les gusta y lo que les disgusta, el problema es que los hombres no escuchamos; así que tú debes estar preparado para escuchar e interesarte en ella, si no lo puedes hacer, mejor dedícate a otra cosa o espera a una chica por quien lo harías.

¡Hasta pronto!

El Hombre Impermeable