La consulta:
Conocí a una chica a principio de año. Hubo una atracción solamente en un principio. Pensaba que no me llegaría a gustar, ya que me gustaba alguien más (una chica que luego me dejó de gustar). Pasaron los meses y me di cuenta de que me ella me gustaba, pero ella rechazaba a todo el mundo. Y yo le dije que me gustaba y me dijo que no en un principio. Pasó el tiempo y no le he vuelto a decir que me gusta. La cosa es que esta chica en sus conversaciones de WhatsApp hace cosas muy raras. No me escribe, pero lee mis mensajes. Y si yo le dejo los suyos como vistos y nada más, se enoja. Es más, me quedo a un taller con ella en el colegio y mi profesor la ha pillado mirándome. Me preguntó si debería tomarme en serio este tema o no. Todo el tiempo que le dejo sus mensajes solo como vistos, eso la enoja.
La opinión del mecánico:
Querido consultante de un colegio ubicado en una lejana galaxia, aquí un puñado de reflexiones sobre tu enigmático caso:
-Es posible que tú le gustes a esa chica que mencionas en tu mensaje, suponiendo que tu imaginación no te haya jugado una mala pasada, cosa que puede suceder cuando uno quiere estar con alguien e inventa con su mente evidencia fantasiosa para probar que la atracción es recíproca. ¡Pero tranquilo mi querido consultante, que en los asuntos de imaginarme cosas que no suceden en la realidad soy todo un experto, peso mediano junior, como bien prueban las publicaciones de este blog desde 2010!
-Respecto de este último punto, la única solución sería que invites a este servidor de la comunidad en línea, es decir yo, para hacer una constatación in situ en tu colegio para saber si le gustas a esta chica. Incluso me ofrezco a pedirle permiso a tu profesor para sentarme de modo temporal en la última fila de tu aula, si te parece en una clase justo antes del recreo para no desgastarme mucho, como se estila allá en el Colegio del Rincón del Vago, para analizar si la chica te presta atención o no.
-En cualquier caso, de existir la atracción que mencionas, lo que puede estar pasando aquí es que ella reacciona de manera algo hostil porque tiene un buen número de otros pretendientes. Y este “buen número” representa para ella un problema que no lo va a resolver en la clase de matemáticas, que de seguro es muy aburrida. Entonces, el rollo no es que no le gustes, sino que tal gusto está bloqueado porque la chamaca en cuestión debe tener una especie de embotellamiento en su cuenta de WhatsApp con chicos que le mandan mensajes a granel. Quizás ella está ofuscada, palabra cuya raíz latina significa “estoy confundida con tanta demanda así que necesito espacio”.
Entonces, es tu decisión esperar a que esta chica se aclare, lo cual puede tomar un tiempo indeterminado que puede durar hasta que ella saque su doctorado en biología en Helsinki, o buscar una chica en otros lado.
(Como siempre) Gracias por la confianza,
E.M.A.
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